El Raulismo, un sentimiento incondicional.

En Agosto Raúl vuelve a la que siempre fue y será su casa, al estadio Santiago Bernabéu. Los Raulistas tenemos una cita ese día, y acudiremos al estadio de Chamartín abarrotado, con nuestras bufandas y camisetas.

El Raulismo es apoyar a nuestro ídolo desde que empezamos a verle jugar siendo unos niños, hasta el día de hoy. Es el seguimiento y reconocimiento incondicional a una carrera futbolística llena de éxitos, de títulos, de récords batidos, viéndole convertirse en el máximo goleador del club, máximo anotador en competiciones Europeas y el jugador que más veces ha vestido la elástica del equipo más laureado del mundo. Los Raulistas le hemos visto crecer al ritmo que lo hacíamos nosotros también. Fue un ídolo de infancia que siguió siéndolo cuando ya no éramos niños.
El Raulismo, también es el reconocimiento de los Madridistas más veteranos del club.
El Raulismo es saber que Raúl no ha sido el jugador más rápido que ha pasado por el Madrid, es reconocer y comprender, que ha sido el que ha corrido más que ninguno sin ser el más veloz.
Los Raulistas sabemos que Raúl no posee la técnica y habilidad que tienen Cristiano y Messi, pero ningún otro jugador me ha hecho sentir lo que dentro de mí se despertaba al ver a Raúl con la pelota sobre el césped de cualquier terreno de juego, al igual que a todos los Raulistas.
El Raulismo es saber que la despedida que se le hizo en 2010 no era la que merecía ese jugador que levantó tres veces la Champions con el equipo de la Capital española. Es seguirle en su aventura Alemana con el Schalke 04, ver partidos narrados en Alemán, saberte como si de un minero total se tratase, la alineación del conjunto de Gelsenkirchen sin ningún ápice de error. Hemos cantado sus goles con la camiseta azul, hemos celebrado sus victorias e incluso los títulos que consiguió en Alemania. El Raulismo es llorar al ver que el "7" que hizo Leyenda en dos años con el Schalke, abandona el club. Hemos aplaudido a una afición que le supo agradecer su entrega, y a un equipo que retiró el dorsal número 7 en su homenaje.
El Raulismo es interminable, es un sentimiento que nos une y nunca se acaba, es incansable. Con su marcha a Qatar, ahí estamos los de siempre, siguiendo los partidos, cantando los goles del Capitán como lo hacíamos cuando jugaba en Madrid o en Alemania. Celebrando la liga de Qatar que ha conseguido este año con el Al Sadd.
El Raulismo es emocionarte cuando le ves torear con la bandera de España en otros países.

Pero sobre todo, el Raulismo, es levantarte del asiento, no caber en sí de alegría al ver la noticia de que Raúl volverá a Madrid por el trofeo Santiago Bernabéu con fecha incluida, será un 22 de Agosto en la que no debemos faltar ningún Raulista. Hemos estado en todos los momentos, siguiéndole viendo partidos incluso en árabe, ahora debemos estar el 22 en Madrid dándole las gracias y ovacionando a ese "7" que para nosotros es el mejor jugador de la historia.